La importancia de usar recursos creativos y artísticos en la infancia (II parte)

En el post de la semana pasada hicimos hincapié en la importancia de desarrollar y fomentar la creación artística de nuestros hijos e hijas, ya que es una actividad que les aporta numerosos beneficios y contribuye a su desarrollo integral.

Recordemos que tanto el arte, como la creatividad son un medio de interacción, comunicación y expresión de sentimientos y emociones que permite el desarrollo de la inteligencia emocional de nuestros hijos e hijas porque les conduce a reconocer sus propias emociones, expresarlas y plasmarlas a través de las artes plásticas, la expresión corporal y la música. Todo ello, fomenta su desarrollo integral.

Además, tenemos la certeza que ayuda a los niños y niñas que sufren ansiedad o estrés porque les sirve de terapia. Al ser capaces de pensar creativamente y manejar problemas, es menos probable que se estresen fácilmente con las tareas escolares.

Reduciendo el estrés y la ansiedad:

Tendrán una mejor salud mental
Fortalecerán su autoestima y la autoconfianza
Potenciarán su memoria
Mejorarán la concentración

Así pues, en el post de esta semana nos vamos a centrar en cómo desarrollar la creatividad en los niños y niñas. Y, para ello, vamos a compartir una serie de tips para fomentar su creatividad.

Claves para desarrollar la creatividad de nuestros hijos e hijas

Para potenciar la creatividad es necesario ofrecer recursos creativos artísticos acordes a una serie de premisas:

Tener en cuenta los intereses del niño. Os invitamos a escuchar las opiniones de vuestros hijos e hijas, dándoles la libertad de expresar sus ideas o de contar sus experiencias. Si partimos de los intereses de los niños y niñas, lograremos su atención, motivación y que se involucren positivamente. Estos intereses generan emoción y sin emoción no hay aprendizaje.
Respetar el ritmo de aprendizaje. Potenciando su autonomía y proporcionándole las herramientas necesarias para llegar a ser independientes. Para ello, nosotros, sus padres y madres, tenemos que ser guías de su aprendizaje, crear un clima adecuado y desarrollar un espacio creativo de aprendizaje apropiado en el hogar.
Favorecer un aprendizaje activo en el que nuestros hijos e hijas sean los protagonistas. La familia puede colaborar para pasar tiempo de calidad con ellos, pero dejándoles su espacio sin buscar la perfección de aquello que están creando.
Ofrecer juegos y actividades. Para que aprendan a encontrar diversas soluciones para un mismo problema. Leer y contar cuentos les genera una gran motivación: los cuentos les divierten y entretienen, pero además potencian su capacidad creativa e imaginación.
Invitar a comunicar lo aprendido, mejorando la expresión emocional. Podemos animarles a expresar y transmitir su propia percepción de la realidad, manifestando emocionalmente lo que les ha hecho sentir, conectando con su potencialidad al ser conocedores de lo que pueden llegar a crear.

Dibujo creado por Noa (4 años).

Si dotamos a nuestros hijos e hijas de los recursos creativos adecuados, contribuimos a su desarrollo cognitivo, motórico y emocional. Esto es así porque podrán expresarse a través del:

Lenguaje plástico
Lenguaje musical
Lenguaje corporal

Además, incrementarán su imaginación, la atención y la percepción de aquello que ven o conocen, con el fin de recrear, crear e incluso transformar el entorno.

Promovemos, así, las inteligencias múltiples de Howard Gardner.

Conclusión

La mayoría de los niños y niñas están felices y pasan un tiempo agradable con sus manualidades fomentando así la emoción por aprender. Si le das a un niño y una niña una variedad de recursos manuales (pinturas, ceras, plastilina, diversos tipos de papel), es probable que veas algo completamente único. Además, aumenta su invención y aprenderán a tomar riesgos y solucionar los problemas.

Por todo esto, desde Up!family os animamos a desarrollar la capacidad creativa de vuestros hijos e hijas, estimulando la observación, la capacidad de explorar y desarrollar un sentido creativo que les será útil para el resto de sus vidas.

Cuando los niños y niñas interactúan con el medio, vivencian todo tipo de aprendizaje (partiendo de su propia experiencia por medio de los sentidos), aprenderán que el mundo puede ser diverso, que hay colores y texturas, formas, sonidos, sensaciones kinestésicas… En definitiva, que hay un campo de conocimiento nuevo.

En definitiva,

el arte aumentará las capacidades intelectuales y emocionales de nuestros hijos e hijas, así como la comunicación entre padres, madres, hijos e hijas.

Además, nuestros hijos e hijas aprenden a conocerse tanto exterior como internamente.